Sooo caballo, soo!! Miradla, qué elegante y hermosa. Desafiante y esbelta...
Una historia se recrea en mi cabeza mientras miro al cielo. No me importa la gente que pasa y el ruido que me rodea... no me importa nada, nada puede estropear este momento... mi imaginación vuela...
Sin duda tengo que dedicárselo a Ana, paisana y ladrona de un montón de sonrisas. Gracias por tan buenos momentos, que espero se repitan pronto. Como ves, no podían faltar las manzanas ;) Bss
PD: El cartel del Banco Pastor es mera coincidencia ;)